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Muhlenbergia rigens, conocida como “deer grass”, es una gramínea perenne nativa de América del Norte y muy apreciada en el diseño de jardines sustentables. Forma matas grandes y arqueadas de hojas lineales que, al mecerse con el viento, aportan dinamismo, volumen y un aire naturalista al espacio. En otoño produce inflorescencias plumosas de tonos plateados a violáceos que realzan su atractivo ornamental.
Puede alcanzar entre 90 y 120 cm de altura y más de 1 metro de diámetro, funcionando como ejemplar aislado, en grupos o para bordes amplios. Se adapta a suelos pobres, resiste la sequía y requiere muy poco mantenimiento, lo que la convierte en una aliada ideal para xerojardinería, jardines urbanos y restauración de áreas degradadas.
Prefiere exposición a pleno sol y suelos bien drenados, aunque tolera cierta compactación. Es resistente a heladas moderadas (zonas USDA 6–10), poco susceptible a plagas y perfecta para atraer fauna benéfica al jardín.
Consejos de siembra
Las semillas de Muhlenbergia rigens germinan mejor tras un breve periodo de estratificación en frío (15–20 días en heladera). Sembrar superficialmente en almácigos a fines del invierno o en primavera temprana, con un sustrato liviano y bien aireado. Cubrir apenas con una fina capa de 1–2 mm de tierra y mantener la humedad sin encharcar. La germinación ocurre en 14–30 días. Trasplantar cuando las plántulas alcancen unos 5–7 cm y presenten raíces firmes.
PODER GERMINATIVO: 60%
Muhlenbergia rigens, conocida como “deer grass”, es una gramínea perenne nativa de América del Norte y muy apreciada en el diseño de jardines sustentables. Forma matas grandes y arqueadas de hojas lineales que, al mecerse con el viento, aportan dinamismo, volumen y un aire naturalista al espacio. En otoño produce inflorescencias plumosas de tonos plateados a violáceos que realzan su atractivo ornamental.
Puede alcanzar entre 90 y 120 cm de altura y más de 1 metro de diámetro, funcionando como ejemplar aislado, en grupos o para bordes amplios. Se adapta a suelos pobres, resiste la sequía y requiere muy poco mantenimiento, lo que la convierte en una aliada ideal para xerojardinería, jardines urbanos y restauración de áreas degradadas.
Prefiere exposición a pleno sol y suelos bien drenados, aunque tolera cierta compactación. Es resistente a heladas moderadas (zonas USDA 6–10), poco susceptible a plagas y perfecta para atraer fauna benéfica al jardín.
Consejos de siembra
Las semillas de Muhlenbergia rigens germinan mejor tras un breve periodo de estratificación en frío (15–20 días en heladera). Sembrar superficialmente en almácigos a fines del invierno o en primavera temprana, con un sustrato liviano y bien aireado. Cubrir apenas con una fina capa de 1–2 mm de tierra y mantener la humedad sin encharcar. La germinación ocurre en 14–30 días. Trasplantar cuando las plántulas alcancen unos 5–7 cm y presenten raíces firmes.
PODER GERMINATIVO: 60%