Astragalus arnottianus es una planta perenne nativa de ambientes de alta montaña, adaptada a regiones áridas y semiáridas. Su delicada floración en tonos lilas y blancos aporta un toque único a jardines naturalistas, secos o de estilo mediterráneo, sumando además valor ecológico y paisajístico.

Forma matas compactas de hasta 50 cm de altura, con hojas pinnadas y racimos florales que atraen abejas y otros polinizadores, fomentando la biodiversidad en el jardín. Su floración se extiende durante la primavera y principios del verano.

Tolera suelos pobres, sequía prolongada y heladas de hasta –15 °C (zonas USDA 5–8). Prefiere exposiciones soleadas y suelos bien drenados. Es una planta de bajo mantenimiento, ideal para proyectos sustentables que buscan conservar flora nativa.

Consejos de siembra

Las semillas de Astragalus arnottianus presentan una cubierta dura, por lo que se recomienda escarificarlas suavemente (lijado o remojo en agua tibia) para mejorar la germinación. La estratificación fría a 4-6 °C durante 3 a 4 semanas ayuda a romper la latencia. Se recomienda sembrarla a finales del invierno o principios de la primavera.

Se siembran en almácigos con sustrato liviano y bien aireado, cubriendo apenas con una fina capa o dejándolas superficialmente para recibir algo de luz. Mantener la humedad constante sin encharcar. La germinación puede tardar entre 2 y 5 semanas, según las condiciones. Trasplantar cuando las plántulas tengan al menos cuatro hojas verdaderas.

PODER GERMINATIVO: 100%